Ya no hay excusas para no reciclar. Cualquier superficie comercial de más de 400 metros tendrá que aceptar los pequeños electrodomésticos aunque el consumidor no compre ninguno. También se pretende fomentar la reutilización de los electrodomésticos. Si es posible, la administración los tendrá que llevar a reparar y se venderán en tiendas de segunda mano.
Fuente de la información : RTVE A la carta.